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miércoles, 9 de noviembre de 2011

A.K. DAMM

Volvemos de nuevo al mundo de mis queridas cervezas. Ya todos sabéis de mi excelsa colección pero como están todas llenas y algunas de ellas me las han traído de Rusia, Usa o Finlandia, evidentemente no las he probado todas. Lo que me plantearé ahora en el blog es ir comprando cervezas, irlas probando y después dejar aquí mi crítica para animaros a probarlas. En principio serán siempre fáciles de conseguir, quiero decir, que se puedan comprar en grandes superficies sin mucho problema. Hablaré también de las que pruebe en bares y buscaré siempre la manera de que las podáis comprar.

Después de esta pequeña intro paso al tema de hoy, que no es otro que la cerveza A.K.DAMM. He comprado esta cerveza en un Carrefour Express así que no tendréis mucho problema para encontrarla y además es baratilla, la tenéis por un euro. Esta cerveza la probé por primera vez, hace como seis o siete años en Ourense, con un amigo que me animó a pedirla. Recuerdo que aquel día me gustó bastante pero la dificultad de encontrarla en los bares ha hecho que no la volviera a tomar hasta ahora. Lo primero que llama la atención es lo bonito de su envase que hace que ya te entre por los ojos.


Esta cerveza nace en el año 2001 y es perteneciente al grupo Damm con lo que una de sus hermanas es la espectacular Voll Damm de la que os hablaré otro día. Fue creada con motivo del 125 aniversario de cervezas Damm y para rendir homenaje al maestro cervecero creador de la marca August Kuentzmann Damm. Por lo visto, está basada en la receta original (bueno, esto ya sabéis que queda muy chulo para venderla, pero difícilmente podrá quedar igual que una cerveza de hace un siglo) y mezcla dos culturas. La tierra natal del fundador se encuentra en la Alsacia francesa y al estar limítrofe con Alemania, bebe de esas dos ideas; la fuerza y carácter germano, con el buen gusto y refinamiento francés.


Es una cerveza suave (4,8%), muy agradable al paladar y que para mi gusto está exquisita. Es una alternativa muy recomendable para las cervezas más tradicionales y para darte un caprichito de vez en cuando. Su aspecto es de rubia, pero con un tono un pelín más oscuro. La propia marca recomienda tomarla a una temperatura entre 5º y 7º grados cosa que lo siento mucho pero no va conmigo. Sin que tenga que llegar a las temperaturas glaciales que a mi más me gustan creo que no debería subir de una temperatura máxima de 3 grados. En resumen, una buena cerveza que creo que os gustará
Namaste

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