NUEVOS TIEMPOS, CAMBIO DE RUMBO

Que barbaridad de tiempo sin escribir nada. Cuanta razón tienen todos aquellos que me dijeron que empezar a escribir un blog es una tarea fácil, pero que lo suyo es continuarlo en el tiempo. Lo de siempre, una falta de tiempo terrible ha hecho que me sea imposible mantenerlo actualizado. Mi paternidad y una nueva afición me tiene liado todo el santo día. A partir de hoy, esa afición se une a la temática del blog y de ahí el cambio de nombre, porque añadir otra palabra al título me parecía demasiado. Más concentrado, mejor.

Hace más o menos un año por estas fechas vi en Canal +, un Informe Robinson que me ha cambiado la vida.

Vi este programa y me flipé, así de claro y así de simple. Quería ser como ellos, quería ser capaz de correr una maratón, pero venían malos tiempos para empezar con esto del running. Todo el mes de diciembre tenía vacaciones, bufff que pereza, y ahora viene Navidad, más pereza, así que decidí que en el 2013 empezaría a correr pensando en disputar mi primera maratón.

Empecé a acumular información, busqué cual sería la mejor manera de entrenar y dirigí mis tiros a alguna maratón que se disputara a finales de año. El día 10 de enero de 2013 fue mi primer entrenamiento (2,5 km. en la friolera de 16 minutos). Que mal lo pasé aquel día, que manera de sufrir, pero terminé el mes acumulando 10 entrenamientos más.

El 18 de febrero después de mucho leer tenía claro que el mejor sitio para debutar en la distancia de maratón sería Valencia así que con 9 meses de antelación reservé el hotel para pasar el fin de semana de la carrera. Una locura, lo pienso ahora y sencillamente alucino, pero estaba con ganas, y creía que podría preparar la carrera en lo que quedaba de año.

Los entrenamientos fueron pasando, las lecturas seguían noche tras noche (entrenamientos personales, blogs de corredores populares....) y el sueño seguía intacto. Tenía claro que podía llegar a Valencia y correr mi primer maratón, muy despacito, pero el único objetivo sería terminarlo. Como no era ya de por si el reto difícil, una salmonela me dejó KO todo el mes de julio. Fue mi único momento de duda, fue el único momento en que pensé que no llegaría. En ese momento todavía no tenía hecha la inscripción, pero en cuanto retomé la actividad e hice un par de entrenos me inscribí para que ya no hubiera ninguna duda y no pudiera echarme atrás.

Los entrenos siguieron pasando, las dudas eran consultadas a mi sensei particular (muchísimas gracias Gonzalo) y todo evolucionaba, sufriendo mucho, con mucho sacrificio pero orgulloso de lo que iba consiguiendo hasta ese momento.

En el mes de septiembre volví a colocarme un dorsal, siete años después de la primera y única vez que lo hice, para correr una popular de 7k. Un mes antes del maratón de Valencia me probé en una Media Maratón y aunque tenía un perfil durísimo quedé muy satisfecho y muchas de las dudas se disiparon.

Llegó el 15 de noviembre, quedaban atrás 1636 kilómetros recorridos..... ya solo quedaba ir a Valencia, pero esa es otra historia que en breve os contaré.

Namaste